
En la película Neeson vuelve como Bryan Mills, el agente de la CIA retirado que nadie pudo parar cuando se vio obligado a salvar a su hija Kim tras ser raptada por unos secuentradores de Albania. Con un talento fuera de lo común para salir airoso de las situaciones más peligrosas, Bryan no tendrá otro remedio que volver a la acción cuando su mujer y su hija se ven en peligro durante sus vacaciones en Estambul.
El culpable, el padre de uno de los secuestradores albanos a los que el ex-agente mató en los sucesos que se narraron en el anterior filme y que busca venganza contra él y su familia. Por supuesto no cuenta con que no trata con un aficionado, por lo que Mills no dudará en utilizar todo lo que aprendió en sus años en las fuerzas especiales para ayudar a sus seres queridos a ponerse a salvo e ir eliminando sistemáticamente a sus enemigos.
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