
“Estuvimos muy cerca de tenerlo hecho. teníamos un trato y un director”, dijo Levine a IndustryGamers. “Pero para nosotros no había un deseo ardiente para hacer una película tan sólo por hacerla”.
“Para nosotros en Take-Two, tenía que ser algo que a) diera a los fans algo que quisieran, y b) para quienes no conocieran BioShock, los introdujera a ago consistente con el juego, como una buena representación de éste. Pero, ¿sabes? No necesitábamos hacerlo”.
Ahí tiene la razón real del porqué el proyecto no se concretó. Ojalá tuvieramos ese tipo de sinceridad imprerara. ¡Nos habría librado de horrores como Doom!
No hay comentarios:
Publicar un comentario